Estaba pensando cómo escribir un resumen de lo presenciado ayer en el Buesa Arena. En este caso, quizás los parciales, los tanteadores, el desarrollo del partido, etc., no sean lo mas importante. Seguramente los dos aspectos fundamentales del encuentro sean el triunfo conseguido ante los malagueños y las sensaciones que transmitió el equipo.
No hay que olvidar que venimos de un sonrojante varapalo en Euroliga. Una de las derrotas que mas ha escocido entre la parroquia baskonista. Tanto por el resultado como por lo que se vio en la cancha, con unos jugadores totalmente hundidos mentalmente. Sin duda un momento crítico en el devenir del equipo.
Sin embargo, el partido frente a Unicaja fue diferente. El nuevo entrenador Tabak introdujo algunas pequeñas variantes en el equipo, jugando dos hombres altos durante más tiempo, gestionando la defensa de los bloqueos de forma diferente, e incluso prescindiendo de un jugador como Rochestie, “por decisión del entrenador”, como dijo posteriormente.
Afortunadamente desde el principio el Baskonia se puso por delante en el marcador, lo que le sirvió para alejar posibles miedos entre los propios jugadores y entre la afición, que apoyó como se merece a su equipo.
Los locales no abandonaron la ventaja en el marcador en ningún momento, aunque los malagueños (se esperaba mas de este equipo en Vitoria…) intentaban voltear el resultado sobre todo a base de triples. Como a falta de algo más de un minuto para el descanso, cuando se colocaron con un 38-37. En esos momentos hubo un jugador que mostró un arrojo importante y pudo y supo contestar a los visitantes con las mismas armas (Heurtel).
En esta ocasión el Caja Laboral se mantuvo firme, serio, motivado, con unos cuantos jugadores con buenos números y buenas prestaciones. A juicio del entrenador Tabak, todavía estamos lejos del nivel que él quiere, pero este primer paso era necesario, sobre todo a nivel mental.
Ahora, y con un poco más de tiempo, debemos centrarnos de nuevo en Euroliga, donde hay todavía opciones reales aunque muy complicadas para clasificarnos para el Top-16, pero donde debemos pelear como si nos fuera la vida, ya que verdaderamente nos va todo en ello. Una derrota este jueves ante los de Scariolo, nos elimina esta vez si, definitivamente.
Es preciso que todos los jugadores quiten sus miedos y sus quebraderos de cabeza y vuelvan a mostrar lo que todo el mundo espera de ellos. El encuentro de Kaunas debe quedar en el olvido, y deben volver los jugadores comprometidos con el equipo (bonito el detalle de Cabezas con Heurtel el domingo, cuando el marbellí quiso ceder sus minutos al joven francés ante su buen juego), así como el nivel que todos los aficionados queremos de este Baskonia.
Así que espero que estos días entre un encuentro y el otro permitan a Zan Tabak seguir trabajando con el equipo, que Nemanja se recupere y vuelva a entrar (cuánto le necesitamos a este hombre…), y que todos los jugadores muestren un espíritu más peleón y acorde al equipo en el que se encuentran. Si conseguimos eso, el buen juego vendrá seguido…
Ahora más que nunca, aupa Baskonia!!!!!